¿Cómo diseñar imagen corporativa para cine? El rebranding de Warner Bros necesitaba ser minimalista.

Fue fundada en 1923 y es de las mayores productoras de entretenimientos, es propietaria por ejemplo de DC, Harry Potter, El señor de los anillos o Matrix. Lo que pretendían era reposicionar la marca, darle un aire nuevo y sentar las bases para los próximos 100 años. Las criticas no tardaron en surgir porque acusaban a la empresa de un cambio muy brusco y de pasarse a "la moda minimalista". Pero lo cierto es que no es verdad, si analizas la historia de sus logos. Lo que pasa es que la funcionalidad en los entornos digitales a día de hoy es crucial. El minimalismo no es una tendencia, es una necesidad para que el logo sea funcional, porque responde a un requisito fundamental del mercado.

Warner Bros rediseña su logo

Dado que Pentagram ha estado rediseñado la imagen de los estudios Warner Bros durante años, no extraña que haya sido esta agencia la elegida para hacerlo de nuevo.

La ya icónica marca de Warner Bros es de sobra reconocida por el público. Lleva toda la vida con nosotros por lo que la concebimos como una marca muy familiar. Pero a pesar de ello, el estudio no contaba con una imagen que cohesionara todos sus productos audiovisuales. Necesitaban un rediseño que permitiera guardar bajo un mismo paraguas y de forma coherente todas sus producciones sin importar en qué tipo de plataforma vaya a verse.

Warner Bros tomó la decisión de llevar a cabo este rebranding ya que parecía encontrarse estancados en un punto entre el pasado y el futuro.

De hecho, en 2023 será su 100º aniversario, por lo que los ejecutivos se pusieron manos a la obra.

Según Dee Dee Myers, vicepresidente ejecutivo de comunicaciones corporativas y asuntos públicos mundiales de Warner Bros., la proliferación de contenido en streaming ha ampliado la competencia del estudio más allá de otros estudios de cine, en plataformas como Netflix, Hulu, Disney+ y servicios similares. La identidad visual se les había quedado un poco anticuada, y también, poniéndose serios necesitaban cambiar la estrategia de marca.

Con el problema identificado y definido acudieron a Pentagram. Más concretamente al equipo de Emily Oberman.

Teniendo en cuenta que se trata de una marca muy consolidada a nivel visual, pensaron que con unos ajustes se podría reestablecer la coherencia general al mismo tiempo que se podía marcar la diferenciación que la compañía buscaba. Todo ello contando con que la marca pudiera aparecer en todo tipos de dispositivos, ya sean móviles o pantallas de cine.

Según Oberman, el equipo tenía como objetivo darle a Warner Bros una voz personal que, sin dejar de hablar de quiénes son, hablara sobre futuro. También que esta pudiera diferenciar a la compañía de sus competidores y al mismo tiempo establecer su propio espacio en el mundo online. Para ello, tendrían que transmitir el mensaje más importante para Warner Bros; en el poder de la historia.

Con este objetivo en mente, trabajaron durante un año en la estrategia de la marca. El resultado fue una guía visual de la marca. En cuanto al logo, seguiría siendo reconocible y familiar para el público, pero sufriría cambios para pasar a ser más elegante y limpio. Para ello, redibujaron los caracteres ‘W’ ‘B’ en busca de un mejor equilibrio. El color también se modificó. Se eligió un azul más brillante.

Hay dos versiones del logotipo: una versión plana y una versión dimensional —solicitada por las divisiones de TV y cine de Warner Bros—. Las paletas secundarias dependerán del contenido en sí.

La tipografía también ha sido fundamental en este rediseño. Se ha creado Warner Bros Sans, una tipografía creada a partir de las iniciales ‘WB’ del escudo e inspirada en el Art Decó de los años 20, década en la que nació la compañía. Con esta tipografía pretenden que, aunque el escudo no esté presente, se note que se trata de Warner Bros.

Tras tres años desarrollando la estrategia de marca, el desarrollo visual y los preparativos del lanzamiento, ya puede verse el resultado de todo este trabajo implementado en los soportes de Warner Bros, incluido el famoso depósito de agua.

Toda esta polémica del logo de Warner adaptándose a las nuevas formas de consumo y plataformas buscando la funcionalidad es similar a lo que pasó en España con Correos.

Pero estas adaptaciones de rebranding no se están dando solo en las grandes gigantes productoras, sino por ejemplo en los cines. El conocido cine Quad de Nueva York reabrió sus puertas con un nuevo enfoque del estilo del clásico cine. También fue trabajo de .

Además de diseñar la señalización, gráficos ambientales e instalaciones digitales, Pentagram también ha creado una nueva marca que introduce un logotipo y una tipografía personalizada la cual reproduce el nombre único y la estética visual del cine.

El cine Quad, que ocupa un lugar importante en la historia de la cinematográfica de Manhattan, abrió sus puertas en 1972 y fue el primer teatro de la ciudad en poner varias pantallas bajo un mismo techo, cuatro concretamente, de ahí su nombre. Además, esta última renovación ha cuidado dejar presente la misión y esencia de este cine independiente.

La identidad y la señalética se han integrado perfectamente en el diseño arquitectónico sala. Asimismo, el vestíbulo del cine cuenta con una dinámica pantalla digital donde se intercalan secuencias de clásicos de la Cohen Film Collection con información sobre horarios y servicios del cine. Los colores por los que ha optado la agencia de diseño han sido el rojo, azul, negro y gris.

Además, al diseño del logotipo de Quad también se le instaló un sistema de señalización modular basado en cuadros con tipografías iluminadas. Pentagram desarrolló iconos personalizados construidos con formas sencillas para la señalización de entradas, salidas y baños.

Por último, ahora Quad cuenta con la tipografía serif GT Walsheim para su web y todo el material corporativo impreso.

¿Y vosotros? ¿Tenéis ganas de ir a un cine que parezca salido del "El quinto elemento? ¿Añorareis el viejo logo de Warner?